Buscando información sobre “energía libre” me encontré de pronto que la web sobre Testla pertenecía a una web neo-nazi.
Leí sobre la ideología de lo que ahora parece ser que se llama “socialismo nacional” y en principio me pareció interesante – la sociedad como un ser cohesionado trabajando con una orientación espiritual… al rato aparecieron las víctimas potenciales empezaban con los homosexuales…
Es lo que pasa con las ideologías, pueden ser muy bonitas, pero al rato tenemos las víctimas sean los judíos, los gitanos, los homosexuales, los campesinos (Stalin mandó matar no sé cuantos campesinos por decreto para evitar que se convirtiesen en una nueva clase social).
Aparece “Dios idea” y pide sacrificios humanos – la Iglesia Católica, los Marxistas, Nazis, el Capitalismo (gobierno del banco) nadie es inocente…
Es un problema de coherencia entre corazón y cerebro - sentimiento y razón.
Una sociedad cohesionada trabajando con fines espirituales me parece maravilloso… Shambala.
La forma más disimulada de hacer sacrificios humanos es la guerra – ya sea represión o revolución - y no descarto que realmente existan entidades (imagínese lo que se quiera) que sean receptoras de esos sacrificios.
Pero evidentemente la lucha es inherente a la vida, para alcanzar un objetivo hay que realizar ciertas selecciones, descartar ciertas cosas… todo depende de cuál sea el objetivo.
En lo que no puedo creer es en que “el fin justifique los medios”, si somos realmente consecuentes “el fin debe determinar los medios, y esos medios deben manifestar la misma naturaleza que la finalidad”.
Nada garantiza que el fin se pueda manifestar tal como lo imaginamos, no es más que una proyección… pero los medios van a generar una energía concreta, son movimientos concretos.
Devastar las tierras, destruir las ciudades, aumentar la ira, el resentimiento… eso está garantizado en una guerra militar, o paramilitar. Pero la promesa de un futuro mejor, eso no.
No soy pacifista a ultranza, soy partidario de la lucha.
Pero nada garantiza que yo tenga razón en mis motivos para luchar… la lucha, sea una discusión, o un combate debe ser algo realmente noble – lo cual implica dejar de lado el ego – lo cual implica también aceptar la derrota, especialmente si es la derrota del ego.
Leí sobre la ideología de lo que ahora parece ser que se llama “socialismo nacional” y en principio me pareció interesante – la sociedad como un ser cohesionado trabajando con una orientación espiritual… al rato aparecieron las víctimas potenciales empezaban con los homosexuales…
Es lo que pasa con las ideologías, pueden ser muy bonitas, pero al rato tenemos las víctimas sean los judíos, los gitanos, los homosexuales, los campesinos (Stalin mandó matar no sé cuantos campesinos por decreto para evitar que se convirtiesen en una nueva clase social).
Aparece “Dios idea” y pide sacrificios humanos – la Iglesia Católica, los Marxistas, Nazis, el Capitalismo (gobierno del banco) nadie es inocente…
Es un problema de coherencia entre corazón y cerebro - sentimiento y razón.
Una sociedad cohesionada trabajando con fines espirituales me parece maravilloso… Shambala.
La forma más disimulada de hacer sacrificios humanos es la guerra – ya sea represión o revolución - y no descarto que realmente existan entidades (imagínese lo que se quiera) que sean receptoras de esos sacrificios.
Pero evidentemente la lucha es inherente a la vida, para alcanzar un objetivo hay que realizar ciertas selecciones, descartar ciertas cosas… todo depende de cuál sea el objetivo.
En lo que no puedo creer es en que “el fin justifique los medios”, si somos realmente consecuentes “el fin debe determinar los medios, y esos medios deben manifestar la misma naturaleza que la finalidad”.
Nada garantiza que el fin se pueda manifestar tal como lo imaginamos, no es más que una proyección… pero los medios van a generar una energía concreta, son movimientos concretos.
Devastar las tierras, destruir las ciudades, aumentar la ira, el resentimiento… eso está garantizado en una guerra militar, o paramilitar. Pero la promesa de un futuro mejor, eso no.
No soy pacifista a ultranza, soy partidario de la lucha.
Pero nada garantiza que yo tenga razón en mis motivos para luchar… la lucha, sea una discusión, o un combate debe ser algo realmente noble – lo cual implica dejar de lado el ego – lo cual implica también aceptar la derrota, especialmente si es la derrota del ego.
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